Hace unos meses estuve a punto de tirar una cafetera. Empezaba haciendo el ruido normal, pero no echaba el café y se paraba. Pregunté en una tienda de reparaciones (Servicio de reparaciones LuyCa C.B., muy cerca de la estación de tren de Avilés) y me dijo que solo tenía que cambiar el filtro. No tuve ni que comprar uno nuevo, fue suficiente limpiar el que tenía (y el amable hombre no me cobró nada por la información).
¿Alguna vez has desechado un móvil porque tenía una pantalla rota? ¿O te has deshecho de un costoso electrodoméstico o aparato electrónico sin saber qué problema tenía?
¿A que te has planteado que tal vez era una solución simple y barata? Pero a menudo solo la mano de obra ya cuesta tanto o más que un aparato nuevo.
El derecho a reparar
Estos son ejemplos claros de cómo la falta de opciones de reparación asequibles afecta a los consumidores. El alto costo de reparación, la falta de piezas o incluso diseños que no favorecen la reparación no nos dejan a menudo otra opción que la de comprar un producto nuevo.
Por eso, con la excusa del Día Internacional de las Reparaciones (3er sábado de octubre), aprovecho para recordar que reparar es UN DERECHO. Un día que celebra la habilidad de reparar y desafía una cultura de desechar y reemplazar.
Este día destaca a las comunidades que luchan por un mundo donde los productos duren más y la reparación sea más sostenible y accesible.
En la Unión Europea la directiva sobre el derecho a reparar es esencial. Aunque todavía existen problemas importantes, como la obsolescencia programada y el difícil acceso a piezas de repuesto, algunos países europeos van adoptando leyes que intentan disminuir esas dificultades.
Por ejemplo, Francia ha introducido incentivos financieros para la reparación y ha creado un «índice de reparabilidad» que califica el grado de dificultad en reparar un producto antes de que el consumidor lo compre.
El derecho a reparar también involucra el acceso a herramientas, manuales y códigos de diagnóstico por parte de los fabricantes, y es vital que se aprueben.
El Día Internacional de la Reparación es un recordatorio útil, diríamos que necesario, de que la tecnología debe estar al servicio de las personas y no al revés. La reparación no solo es una opción sostenible, sino un derecho que debemos defender por nuestro propio bien.
Qué son los Repair cafés
Los Repair Cafés van ganando en popularidad. Ya no se encuentran solo en las ciudades más pobladas. En estos lugares, voluntarios con habilidades técnicas enseñan cómo arreglar ropa y electrodomésticos menores de forma gratuita.
Estos eventos, además de promover la reparación, unen a la sociedad y enseñan a la población sobre los beneficios del consumo sostenible.
Echa un vistazo a las guías de reparación de Repair Café: te podrá sacar de más de un apuro y ahorrarte un buen dinero. Si te apuntas al newsletter estarás al corriente de noticias relacionadas con el tema. Y tal vez haya algún Repair café en tu ciudad o puedes organizar alguno.
Hazlo tú mismo/a
También puedes invertir en kits de reparación multiusos y guías de reparación DIY (hazlo tu mismo), que puedes encontrar fácilmente en línea. Estos recursos, además de empoderarte para prolongar la vida útil de tus dispositivos, te vincularán con una comunidad que valora la sostenibilidad.
Encuentra tu tienda de reparaciones
Pero si, más que aprender a reparar y meterte en este mundillo, lo que buscas es soluciones puntuales a objetos que no quieres tirar, tampoco faltan alternativas.
La última pandemia, la proliferación de las crisis económicas y la subida de precios han favorecido un repunte de estos establecimientos que reparan «de todo un poco». Y, como siempre ocurre con estas cosas, cuanto más se utilicen, más probabilidades habrá de que se mantengan y se extiendan.
Piensa que estos profesionales saben muy bien cuáles son los problemas más comunes y a menudo cuentan con los recambios necesarios. Averigua aquí cuál es tu Repair Café más cercano.
También hay grandes marcas y plataformas, así como negocios especializados, que reparan móviles o aparatos electrónicos. ¡Solo tienes que hacer una búsqueda por tu zona en internet!
Tu propio Repair Café
Otra idea excelente sería organizar tu propio Repair Café. La Fundación Repair Café International ofrece apoyo en todo el mundo a grupos locales que deseen hacerlo. Aquí tienes toda la información.
Piensa en las numerosas ventajas de acercarse a este mundo: la reparación es un derecho que te permite conservar objetos de valor sentimental, ahorrar un buen dinero, evitar deshechos y reducir el impacto medioambiental.
¡Y no menosprecies la oportunidad de aprender habilidades manuales y de transmitir valores a la siguiente generación!
